¿Qué pasó?

Pasó que contigo me enseñé a querer libre,
me enseñé a querer sin manos y sin cuestiones.
Me enseñé a querer directa y limpia;
me enseñé a querer niña.

Me enseñé a querer al día y sin regalías;
con alas y descalza.
Me enseñé a querer en fotos y en almohadas;
en silencio y en pláticas de madrugada.
Me enseñé a querer con risas y alcoholizada;
deshidratada y en el agua;
en cachitos y pegada.

Me enseñé a querer dormida
y me enseñé a querer sin sueños.
Me enseñé a querer por flama y por karma;
callada, a los ojos y disimulada.

Me enseñé a querer mis miedos;
y me enseñé a fumar palabras.


Me enseñé a querer el privilegio de no poderte ni perder. 

Comentarios

Entradas populares